Problemas de BCN: inseguridad, limpieza y vivienda
Suciedad en Barcelona / Foto: @FLUIDiRESILIENT |
Los principales problemas de Barcelona: inseguridad, limpieza y vivienda
Más de la mitad de los ciudadanos dice que la gestión municipal es mala o muy mala
Los principales problemas de Barcelona son, por este orden, la inseguridad, la limpieza y el acceso a la vivienda. Los datos salen del Barómetro municipal de diciembre, el último que se hará antes de las elecciones.
La inseguridad, o lo que es lo mismo el alto índice de delitos de la ciudad (1,2 millones entre 2015 y septiembre de 2022), preocupa al 24,8% de los barceloneses. En mayo de 2016, un año después de que Colau llegara a la alcaldía, inquietaba al 5,1%. La subida es del 19,7%.
Algo similar pasa con la limpieza. Muchas zonas de Barcelona están sucias. Y lo están como hacía años que no se veía y a pesar de que el coste de la nueva contrata es de unos 300 millones de euros anuales. Hay mucho incivismo, pero el trabajo de las empresas de limpieza y el control municipal podrían ser mejores.
Un 15,8% de la población ve la ciudad sucia
Según la encuesta municipal, la limpieza es el segundo problema que más preocupa a los barceloneses. El 15,8% de los encuestados opina que la ciudad está dejada. Este porcentaje era notablemente inferior en mayo de 2016, un 4,4%. En este caso, el incremento es del 11,4%.
Principales problemas de Barcelona / Foto: Ayuntamiento de Barcelona |
El acceso a la vivienda es el tercer problema para los ciudadanos de la capital catalana. Preocupa al 7,6% de la gente, 5,6% puntos por encima de mayo de 2016 (2%). El alto precio de los alquileres y de venta de las viviendas, así como la falta de un parque de vivienda público que haga de contrapeso a la oferta privada son algunas de las razones para lograr un piso en la ciudad.
Pisos públicos
Colau prometió en 2015, antes de llegar a la alcaldía, poner en marcha unos 8.000 pisos. Según Verificat, desde 2016, el Ayuntamiento ha construido 1.442 pisos públicos, ha comprado otros 1.349 en el mercado privado y ha logrado otro millar a través de la bolsa de alquiler, en la que propietarios ceden viviendas a cambio de un pago que hace el consistorio. En total, se han incorporado al parque público de Barcelona unos 3.800 pisos.
A pesar del esfuerzo municipal por incrementar el número de viviendas de alquiler social, la lista de la gente que espera un piso público es tan alta que las casas construidas, compradas o cedidas son insuficientes. Solo en el caso de viviendas de emergencia social, 664 unidades familiares esperaban en enero un piso ya adjudicado. El problema, en este caso, es sobre todo porque la Generalitat no aporta los pisos que le pertocan a la bolsa de emergencia. En octubre, Metrópoli públicó que entre 2016 y 2021 el Ayuntamiento aportó 1.066 pisos a la emergencia social por 340 de la Generalitat.
Datos sobre la valoración ciudadana sobre la gestión municipal / Foto: Ayutamiento de Barcelona |
La gestión municipal, mala o muy mala
Al margen de los problemas más graves según los encuestados, en el Barómetro de diciembre por primera vez más de la mitad de los barceloneses opina que la gestión del Ayuntamiento es mala o muy mala. Lo dice el 50,4%. Desde mayo de 2016, el porcentaje se ha doblado. Entonces era del 25,8%.
A esa cantidad hay que restar las promociónes diseñadas e incluso ejecutadas del anterior gobierno hasta mayo de 2015 que se las apropia Colau sin serlo. Aparte las compras de pisos de hasta 1 millón por una sola vivienda, 600.000, 525.000, 300.000 €, etc. Cuando en Cáceres con 2,5 millones de € construyen 50 viviendas públicas s a 50.000 € de coste cada una, y Baleares el mismo precio.
ResponderEliminarLa malversación es un delito que está regulado en el Código Penal, concretamente en los artículos 432 a 435 dentro del Título XIX de los Delitos contra la Administración Pública.