El PP de Barcelona, en guerra
El PP de Barcelona, en guerra a dos semanas de las municipales
El actual presidente del grupo municipal, Óscar Ramírez, ha quedado fuera de la lsita de Sirera, ha cesado a tres asesoras y se ha dado de baja del partido
A dos semanas de las municipales de Barcelona, en el PP catalán se vive una auténtica "Guerra civil". El término lo acuñó para el caso la directora del digital Tot Barcelona en una completísima información que se puede recuperar clicando en el enlace.
A grandes rasgos, el tema es que al alcaldable del PP, Daniel Sirera, le ha entrado una piedra en el zapato después de que el actual presidente del grupo municipal en el Ayuntamiento de Barcelona, Óscar Ramírez, haya quedado fuera de la lista de Sirera.
De Bou a Sirera
Según explicó el Tot Barcelona, que citaba fuentes próximas al candidato, Sirera le ofreció a Ramírez ir el número cuatro de la formación sin margen de negociación, algo que él consideró humillante tras haber defendido las siglas del PP durante todo el mandato ante algunas decisiones unilaterales -como despidos y contrataciones de asesores y ceses y nombramientos de consejeros de distrito- por parte de Josep Bou, presidente del grupo municipal hasta que dejó el Ayuntamiento en marzo y con el que Ramírez mantenía una complicada relación, por decirlo suavemente.
Haber prescindido de Ramírez ha tenido graves consecuencias. El funcionamiento del grupo municipal es autónomo y Ramírez cesó hace unas semanas a tres asesoras del partido que trabajaban en el Ayuntamiento. Se trata de Gema Gesa, secretaría con Alberto Fernández Díaz y Bou y que Sirera ha puesto de nueve en la candidatura; Irene Pardo, exconsejera del distrito de Les Corts y ahora candidata a la alcaldía de Sant Adrià del Besòs, y Míriam Casanova, exregidora con Fernández Díaz y este mandato asesora económica, han explicado fuentes próximas al grupo municipal.
Sirera con Ramírez / Foto: Twitter-Daniel Sirera |
Ramírez se ha dado de baja del PP
Otro efecto de esta guerra civil en los populares catalanes es que este mismo mes de mayo, a las puertas de las elecciones, Ramírez se ha dado de baja del partido y ha renunciado a todos sus cargos. Entre otros, formaba parte de la Ejecutiva Nacional presidida por Alberto Núñez Feijóo.
Desde el PP catalán recriminan a Ramírez su sed de venganza y el intento de reventar la campaña a Sirera, mientras que fuentes próximas al presidente del grupo municipal apuntan que el objetivo de Sirera era usar asesores y recursos del grupo municipal para hacer la campaña al alcaldable popular. A este hecho se suma que Pardo, uno de los cargos cesados por Ramírez, es candidata del PP en Sant Adrià y se ve "inmoral" cobrar del Ayuntamiento de Barcelona mientras se hace campaña para otro municipio.
A dos semanas para las elecciones del 28M está por ver si esta "guerra civil" en el PP catalán ha vivido ya su último episodio.
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